En la cima

Por un momento subo a la cima

del monte del deseo sagrado,

donde el tiempo no perdona

y la vida aun todavía esta en mi manos,

donde la nada no es importante

y el amor es la madre de todas las cosas.

Ahí de pie mirando al firmamento,

en busca de tu luz y la encuentro!

Entre niebla, oscuridad y espirales negras,

en la noche donde siempre he estado,

escondido listo para pecar

y tú tratando de escapar,

en donde hasta hace poco,

fue mucho tiempo mi hogar.

Grito con señales del alma

para decirte aquí estoy....

y bajo del monte arañando la tierra,

escondiendo mis heridas, corriendo,

hacia ti...

Sin importar si me hundo

en las arenas de este camino.

Sin importar quien soy,

quiero olvidarme de las flores negras

que han adornado mis noches,

mientras corría veneno en mi sangre,

por eso mi alma encerró mis secretos

y por eso responderé que no soy,

lo que dice el viento...

Por eso negare hasta mi alma

apretando tu cuerpo al mío,

sin ver si mis recuerdos están aquí

saltando al hoyo de la incertidumbre,

pero junto a ti…

Sin ver si existe un final,

sin ver si existe una realidad,

para siempre colarme en tu destino,

en un solo canto, en un solo grito,

de resistencia!

Para enfrentar al tiempo en un solo aliento

y si hay que morir para estar junto a ti

abrazar a la muerte hacerla mi escudo,

para protegerte, para regresar a tu pecho,

y nunca dejarte ir.

El Desaparecido